La Nación/Hugo Scolnik, profesor e investigador del DC, conversó con Nora Bär sobre los nuevos riesgos de seguridad informática a los que se enfrentan los países en la actualidad.
Hace unos días se dio a conocer que un ciberataque reveló los datos de casi cuatro millones de usuarios de sitios de citas. Noticias como ésta son usuales para Hugo Scolnik, doctorado en matemática en la Universidad de Zurich, fundador del Departamento de Ciencias de la Computación de la UBA, criptógrafo y cofundador del posgrado en seguridad informática que ofrecen tres facultades de la misma universidad: Exactas, Ingeniería y Economía. «En este momento es mucho más barato y más efectivo hacer un ciberataque que uno convencional», dijo durante su participación en el ciclo Conversaciones en LA NACION.
Doctor Scolnik, ¿está la Argentina preparada para un ciberataque?
-No. En general hay deficiencias prácticamente en todos los países. Hay algunos donde se ha invertido mucho en defender infraestructuras críticas, pero en la Argentina estamos en pañales.
-¿Son usuales los ataques entre países?
-Totalmente. Hay un sitio donde podés verlos en tiempo real. Bueno, ya hubo muchos casos. Es más barato y más efectivo en este momento hacer un ciberataque que un ataque militar convencional. Un caso fue cuando a Irán le atacaron los centrifugadores para evitar que avanzara en el plan nuclear. Es lo más normal.
-El año pasado la revista Time consignó que más de 3000 empresas norteamericanas habían sufrido ataques de hackers. ¿Hay datos de la Argentina?
-Sí, hay un sitio que tiene una estadística diaria. Por supuesto son los reportados, hay muchos lugares que son hackeados y no dicen nada. Generalmente, en el sistema bancario o financiero se oculta.
-El que todos pongamos nuestros datos en lo que se llama «la nube», ¿nos da más seguridad o nos vuelve más vulnerables?
-Depende, un famoso criptógrafo israelí dijo hace poco que «el problema de las nubes es que se evaporan». O sea, para que una empresa o institución ponga todos sus datos en un sitio, tienen que estar encriptados. Y por otro lado, el servicio tiene que tener continuidad. Por eso es menos popular de lo que se cree. Sin embargo, sería una muy buena solución tecnológica. Sería ideal que uno llegara a su casa y conectara su máquina a una nube donde habría expertos en seguridad que le garantizarían que no hay virus y que no se pierden sus datos.
-¿Dada la cantidad de datos que circulan por Internet, somos cada vez más transparentes?
-Sí. Además, como cada vez hay más dispositivos físicos conectados a Internet, como automóviles, casas, industrias…, los hackers se están moviendo hacia el ataque a las estructuras físicas, que es mucho peor que lo que pasaba antes.
-¿Es verdad que aunque se diseñen los sistemas más seguros, siempre habrá un eslabón débil, que es el ser humano?
-La mayoría de los ataques son por ingeniería social, que es convencer a una persona o engañarla para que revele un secreto que dé acceso a los sistemas. Muchas veces cuando quieren acceder a la cúpula de una empresa buscan personal auxiliar que puede ser más vulnerable.
-¿Tenemos suficientes especialistas en seguridad informática?
-No. La demanda es tremenda. Más de la mitad de nuestros alumnos [del posgrado de seguridad informática] son extranjeros, pero se quedan acá porque consiguen trabajo.
La demanda de especialistas en seguridad informática es tremenda
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Fotos gentileza de La Nación